El predio que fue centro clandestino de detención durante la última dictadura, Puesto Vasco, de la calle Pilcomayo en Don Bosco, fue cedido por la Policía de la Provincia para que el municipio lo destine como Sitio para la Memoria, Verdad y Justicia.
Este jueves 17 se realizó la entrega de las llaves del inmueble a la intendente Mayra Mendoza.
En el lugar funcionó en la última década la Comisaría de la Mujer, que ahora fue trasladada a Gran Canaria 1350, de Quilmes Oeste, y continuará en propiedad lindera la SubComisaría de Don Bosco, que seguirá tomando denuncias por violencia de género.
Estuvieron el secretario de DDHH de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, el subsecretario de DDHH de la Provincia, Matías Moreno, el vicerrector de la Universidad de Quilmes, Alfredo Alfonso, el secretario de seguridad del municipio, Gaspar De Stéfano, la sub secretaria de seguridad ciudadana María Sol Barravino, el director general de DDHH, Rubén Schell, y representantes del colectivo Memoria, Verdad, Justicia en nombre de las cinco instituciones que lo cogestionarán, Susana Brardinelli y Viviana Buscaglia.
El Secretario de DDHH de la Nación, entre otras cosas, destacó lo importante de entregar este lugar para Quilmes, donde funcionó lo que fue el llamado Circuito Camps:
«En este lugar pasaron 80 compañeros que estuvieron detenidos, algunos sobrevivieron, otros no. Hubo casos emblemáticos como Graiver, que fue el inicio de la persecución a la familia para la apropiación o compra ilegal de Papel Prensa. Pasó por acá la familia Timerman. Este circuito tuvo como cabeza al comisario Etchecolatz».
Horacio Pietragalla Corti
El vicerrector de la UNQ dijo: «venimos trabajando ya hace 32 años con este precepto, anclados en el territorio, en el contexto social, que es donde debe estar la universidad pública», explicando qué significa la cogestión del lugar.
«Vamos a trabajar para que éste sea un espacio abierto a la comunidad donde se pueda conocer lo que sucedió y que también pueda tener una impronta de acceder a derechos, que la comunidad sepa la historia del lugar. También habrá una oficina que sea de utilidad de nuestros vecinos».
Mayra Mendoza
