
El boxeo nacional sumó este fin de semana una nueva actuación contundente de una de sus promesas más firmes. El invicto Touba Niang, oriundo de Senegal y radicado en la Argentina, venció por nocaut técnico en el primer asalto a Ulises Vargas, en una pelea de la categoría superwélter disputada en el estadio de la Federación Argentina de Box.
La pelea, pactada a seis rounds, duró apenas unos minutos. Desde el inicio, ambos boxeadores salieron a intercambiar golpes con decisión, pero fue Niang quien marcó la diferencia con una combinación letal de velocidad y potencia. Vargas cayó dos veces en el primer asalto y su equipo, el Team Castaño, decidió arrojar la toalla antes de que el castigo fuera mayor.
Con esta victoria, Niang mantiene su invicto con seis triunfos (cuatro por KO) y continúa construyendo un perfil sólido en el campo rentado. Este fue su cuarto combate en lo que va del año, todos con saldo positivo. Su rival, Ulises Vargas, también protagonizaba su cuarta pelea del 2025, pero quedó con un récord negativo de 4-6-1 (1 KO).
El triunfo de Niang no solo destaca por la contundencia, sino por su regularidad: a sus 6-0 le suma una presencia constante en los rings argentinos, una señal de disciplina y constancia que comienza a llamar la atención en el ambiente del boxeo profesional.
Además del resultado, la pelea dejó un momento curioso: en medio de los intercambios, uno de los golpes le pasó con peligrosa cercanía al árbitro Carlos Gómez, que por un instante quedó en el centro del fuego cruzado. Por suerte, el incidente no pasó a mayores.
Radicado desde hace años en el país, y con base de entrenamiento en el conurbano, Touba Niang se consolida como uno de los nombres propios a seguir en el nuevo mapa del boxeo argentino. Con una potencia notable y un estilo ofensivo, suma una nueva victoria que lo proyecta hacia desafíos más exigentes en el corto plazo.