A 50 AÑOS DE UN DESAPARECIDO LOCAL

Investigación exclusiva

Sergio Dicovsky fue desaparecido luego de matar al militar Ibarzábal

En caravana, un Chevrolet blanco; una Rastrojero con lona verde en la caja y un Falcon celeste avanzaban desde la avenida Pasco (equivalente a una calle 800, en Solano) hacia el sur, por Donato Alvarez, un asfalto negro en una ancha franja de suelo apisonado.

Desde la cabina de la Rastrojero, el más joven, de espesos bigotes, terminó de hojear la Estrella Roja del 18 de noviembre que informaba el pase de FAP. Reparó en las casas de chapa o a medio construir en Solano, casi al límite con Brown. Hasta que…

–Mirá –señaló el chofer.

Manuel miró, en el cruce con San Martín (828), un operativo de tránsito. Se desviaron hacia la izquierda por la 826. Entre tumbos, avanzaron hacia un horizonte que tragaba la calle con su garganta de límpido cielo; la última imagen bucólica que vería.

Doblaron a la derecha por la 897, la primera paralela a Alvarez. Avanzaron lento por esas irregulares calles de tierra, entre delgados árboles de distintas especies junto a las zanjas.

Eran las 19 del martes 19 de noviembre de 1974.

A la Policía le pareció sospechoso que tantos abandonasen el único asfalto para avanzar por la tierra. Les fue fácil divisarlos entre las pocas casas de esos descampados. Confirmaron su pálpito cuando vieron que se acercaban a sólo cien metros. Dejaron a los de Tránsito y corrieron a cortarles el paso.

Los del Chevrolet de protección dispararon, aceleraron, giraron a la izquierda y se perdieron hacia el Este.

La Rastrojero frenó 90 metros antes del asfalto, cuando ya le había quedado atrás la bocacalle; sin margen para retroceder; vieron a los uniformados delante; el primero en contestar sus disparos fue Manuel, con una Itaka; así cubrió al chofer, le dio tiempo a abrir la puerta, desenfundar un arma corta, bajar, contestar el fuego y replegarse mientras estallaba el parabrisas.

Los del Falcon avanzaron sin disparar, uno por izquierda; el otro aprovechó el ángulo que dejaba un baldío en la esquina.

Un vecino policía se sumó. Los uniformados se parapetaron desde el Fiat 128 de un inspector de Tránsito; contaron “nueve extremistas”, a otro de los cuales hirieron pero que, retirado por dos compañeros, disparó por atrás de la camioneta.

Entonces cayó herido en una pierna el agente Salvador Cavalli.

Cavalli (legajo 89.939). Fuente: Informe de la Delegación Lanús de Inteligencia a sus superiores de la S.I.P.B.A. 15.697 (25) Folio 5, del 20-11-74 a las 9:59. | En Archivo Provincial de la Memoria.

Otro colaboracionista que no tenía nada que hacer ahí, López, corrió por 827, entre la Rastrojero y el Falcon. En la segunda casa de esa calle, un joven vecino recibió una herida leve.

Manuel con dificultad para mantenerse sobre su lado izquierdo, se apoyó en la Rastrojero y se trepó a la caja trasera.

Los demás combatientes retrocedían por la 898 a los tiros:

–¡Viva La Patria! ¡Viva La Patria!

Dejaron el Falcon y corrieron a tomar un Peugeot bordó que justo pasaba por la avenida.

Mientras, los que rodeaban el Rastrojero apuntaron a Manuel, quien arrojó el Magnum antes de levantar los brazos.

Los vecinos afirmaron que fue detenido quien había quedado último para permitir la fuga de los restantes.

Lo bajaron tironeando del pantalón claro, se lo llevaron de la camisa a cuadros, entre insultos. El oficial Tarela siguió con la vista el rastro de sangre pero se quedó ante la caja. Bajo la lona verde, apreció: A la izquierda, el revólver, una Browning machine gun 50, sin montar en el trípode, una carpa de campaña, dos baldes, un inodoro portátil, volantes del ERP y tres vainas servidas; a la derecha, un armario metálico de oficina aunque con rejillas y una tapa que tenía, a lo largo, tres orificios redondos. Cuando la abrió, quedó con el ceño fruncido, en silencio.

Otros sacaban de la zanja al herido sumado de motu propio, ante Horacio Casal, asomado a la ventana de su casa en 898 N° 2744.

Aquél fue llevado a la clínica; Manuel, a una dependencia.

Más policías hallaron en el Falcon instrumental, anestésicos, agujas… Del baldío recogieron una pistola y un arma larga.

Se acercaron a la Rastrojero, por detrás, al tiempo que los vecinos salían a ver. Notaron qué había enmudecido al oficial; no había que ser alto para ver dentro del armario: un hombre con una venda, equipo de gimnasia, las rodillas apenas flexionadas sobre un lado, baleado en una pierna, una mano y la cabeza.

–Llamen para que vengan a tomarle las huellas.

Revisó el revólver ahí arrojado, contenía tres cartuchos.

Un uniformado anotó la patente B902614.

–Manden a investigar la numeración del vehículo.

–Señor, anotamos la B185598 del Falcon celeste, modelo ‘65.

–Hagan todo; pueden ser adulteradas. Esto va a traer cola. Creo que es el tipo que salió en la revista del ERP.

–Mire lo que había en la cabina –el policía blandía una cédula.

–Sergio Gustavo Dicovsky, 5.798.352, clase ‘51.

–Y esto –le pasó una libreta sin tapas, tipo anotador, con manuscritos, un tanto ilegible, con muchos nombres.

Pronto llegó un fotógrafo, quien oyó y fue a buscar un teléfono:

–Soy Carlos. ¡Yodko! ¿Te acordás del militar secuestrado en la toma de Azul? Lo mataron recién.

Arribaron más patrullas Estancieras; una Ford F100 verde y un helicóptero aterrizó en un baldío. Todos fueron puestos al tanto:

–El Chevy huyó hacia Quilmes. De la Rastrojero, tenemos a uno; otro escapó. Los del Falcon robaron un auto bordó.

–Deben haberse separado para tirotear desde distintos ángulos. No es táctico que disparasen todos desde el mismo lugar; en grupo, hubieran sido un blanco fácil.

Empezaron a mirar las pocas casas entre los baldíos de yuyales.

La primera cobertura

Otra casa a requisar, fue la de San Nicolás 4015 de la Capital; el domicilio del portador de la cédula. Allí, Miguel Dicovsky, de 18 años, en ausencia de la madre, cuidaba de su hermana Cecilia.

No rompieron ni robaron ni maltrataron pero en algo repararon:

–¿Historia? ¿Qué hacés leyendo Historia?

–Es que me la llevé. Tengo que rendir lo del año –balbuceó ella.

El Peugeot bordó abandonado en Villa Barceló, Lanús, quedó con armas, como un Winchester con la inscripción “Victoria o Muerte. A Vencer o Morir por la Patria. Libertad o Muerte”.

En la Regional, el inspector Omar Ventini recibía el informe:

–Señor, tenemos los datos. El Falcon es de Israel Liscovich.

–Liscovich, Dicovsky… ay, ay, ay –resopló.

En el nuevo parte a la Jefatura, Dicovsky sumaba otro balazo:

Fue detenido un herido de bala en la pierna y el tórax.

Nada de eso compartieron con la prensa, a la que informaron:

–Por la Rastrojero, dimos con la casa de Ceferino Fernández, donde hallamos discos del Che Guevara; banderas del ERP, armas… Ahí detuvimos a Manuel Gómez y Tecla Castro, puestos a disposición del juez federal Armando Grau.

No sabían que la esposa de Ceferino, al ver que no llegaban sus padres, se había escondido en la casa de los vecinos. Retuvieron dos días en la Comisaría a los padres de ella. Al responsable de Logística, llevará tiempo capturarlo. Lo mismo que a Adolfo César Lito Liscovich, quien manejaba el Falcon de su padre.

Mientras, seguían estudiando la libreta hallada en la Rastrojero. Dos de los anotados allí eran noticia:

Despedirán a Ibarzábal, el general Osvaldo René Azpitarte y el teniente coronel Coelho”.

Juan Luis Coelho, jefe en Azul, profetizó:

–No está lejano el día en que la patria nos llame en su defensa.

Mientras, el espía internacional Arancibia Clavel emitió su parte:

“… el asesino Licowsky, ex empleado de Gelbard, está detenido”.

Del destino de Dicovsky dieron cuenta los diarios:

No se confirmó la versión coincidente con los vecinos: se habría detenido a uno de los extremistas, Sergio Licowsky.

Pronto, recibieron más datos del apellido correcto, hijo de Emir Dicovsky, fallecido el 17 de marzo de 1970, quien había tenido un consultorio a dos cuadras de Craviotto y Calchaquí.

Calchaquí 4424. Foto: CIQ

A las 3.30 del jueves 21, la Caminera entró a Calchaquí 4424, por un boquete en la puerta. Detrás, los de la Seccional 3ª, se ocuparon de anotar lo hallado, que incluía “tres libros de Actas de la Subcomisaría de Savio; bibliorato y 8 bolsas de monedas con las siglas del Banco Río y patentes de autos…”.

–Por eso circulaban aún con las patentes originales.

–Los vecinos dicen que había movimiento de jóvenes; que no eran muy dados y que la chica estaba embarazada.

–¿Y a ésa quién le avisó que se rajara? ¡Los del Chevrolet!

Respecto del chalet, ya de mañana, dijeron a los diarios:

–En una de las habitaciones, había una construcción metálica con dos literas, tipo cárcel del pueblo.

Con la pista de la embarazada, siguieron a la suegra. A la salida del Juzgado, la abordaron antes de que subiera a su auto. Bajaron al matrimonio que la acompañaba, aunque dejaron arriba a otra mujer. A poco de andar, las encapucharon y mintieron:

–Tranquila, Rosa, somos compañeros de Sergio, que ya está en Cuba. Sólo necesitamos saber con quién vivía, es por un temita.

Ante tal incongruencia, la señora Naiberger no dijo nada.

Horas después, al lado de la ruta, les quitaron las capuchas y las dejaron irse en su auto, seguidas por una camioneta.

Ya habían desaprovechado una posibilidad de salvar al coronel:

Hacia febrero, la agrupación ilegal estaba dispuesta a canjear su libertad. Pero el Ejército no tenía a esos dos extremistas…

… desaparecidos en Azul, Reynaldo Roldán y Jorge Antelo,[2] el esposo de Elena Da Silva, ex Brigada Masetti (FAL), ya en zona norte.

[2] Tata Yofre (2011), ex jefe de los servicios de inteligencia, publicó que el ERP habló por teléfono con el general Leandro Anaya, jefe del Ejército, quien les dijo que de ambos había dispuesto la Federal. El ERP anunció que “De acuerdo a la informado por el Ejército Argentino, se aplicará la justicia popular sin juicio sumario a la Policía Federal y a sus organismos especializados en torturas”.

La Policía lo había hecho notar en un informe secreto:

El ERP [puso] condiciones: 1) Libertad de los detenidos; 2) Derogación de la Ley represiva; 3) Derogación del decreto de ilegalización. A cambio, dejaría en libertad a los secuestrados y suspendería operaciones. Ante lo que calificaron de silencio gubernamental aconsejaron a sus adictos mantener firmeza en sus actividades.

A eso se refería un ex guerrillero de contacto con los represores:

Ante el silencio, mataron al mayor Néstor López, y al teniente Roberto Carbajo. Los muertos eran 8. Después, Ibarzábal. El apresuramiento del conductor (la ‘pinza’ era para un grupo montonero), obligó al vehículo delantero a escapar. El sargento Sergio Licowsky, cumpliendo órdenes, ejecutó al prisionero…

Licowsky fue capturado por un comando militar que lo metió en un vehículo, le colocó un explosivo y lo hizo volar.

También Eduardo Ernihold, quien mató al mayor Jaime Gimeno, había sido llevado herido al puesto de Camineros, donde le dieron muerte.

El día 21, en tres vehículos al mando de uno vestido de militar, se robaron un cadáver de Autopsias, en Avellaneda, aunque al diario La Razón le dijeron que era el de Víctor Taboada.

Desde Chaco, para traerlos a la Capital, la Federal mintió haberle hallado una carta de Ibarzábal a Jorge Ramón Martín Franco y Crisanto Tito Rípodas, de quien no sabían que era del Comité Central, elegido en el V Congreso en que se fundó el ERP; ni que Martín actuó en Azul; ni que había alquilado con Dicovsky, en 1973, una casa en La Tablada para operar sobre Chrysler, donde Manuel volanteaba en bicicleta hasta que consiguió un Citroën.

El PRT no nombró al compañero caído al referirse al ejecutado:

(…) En un traslado del prisionero de guerra Teniente Coronel lbarzábal, un enfrentamiento obligó a ajusticiarlo. Fue detenido un combatiente en perfectas condiciones. Nuestra organización procuró preservar la vida. No ha sido igual el tratamiento a nuestros combatientes, al extremo de asesinar fríamente a 16 en Catamarca. Esa actitud sanguinaria ha obligado a ejercer el derecho de represalia. Ibarzábal no había sido incluido; su ‘ejecución’ es resultado de la campaña represiva.

Base de Datos Parque de la Memoria

Un film a 45 años

La película que contribuí a hacer se basó en esta investigación que hice para un libro:

Mi nota para el cohete a la luna

Fuentes

19 fojas sobre Sergio Dicovsky en el Archivo D.I.P.P.B.A. (inteligencia policial) de las Mesas DS 1453; 3600 y 3841, en resguardo de la Comisión Provincial por la Memoria.

Cavalli (legajo 89.939). Fuente: Informe de la Delegación Lanús de Inteligencia a sus superiores de la S.I.P.B.A. Nº 15.697 (25) Folio 5, del 20-11-74 a las 9:59. | En Archivo Provincial de la Memoria.

Comunicación 340 dirigido al Jefe de Policía de la Provincia, con datos de la Unidad Regional Lanús.

Folio 5, Policía de la Provincia – S.I.P.B.A. Nº 15.697 (25) 20-11-74 Hora recepción: 9.59 | Reiterado en el Memo de la Delegación Lanús de Policía con fecha 20-11-74 al S.I.P.B.A. en Archivo y Fichero Varios 1453 – “C” Nº 5938 TOMO 3 | 15-16-UI 25.000– VIII-72

Ampliación de informe policial suministrado por Sección C 5938; del 22 de noviembre de 1974.

El detalle de lo que había fue tomado del Volante C.O.S.I. 11/2, del Comando de Operaciones a los jefes de Policía y de Inteligencia, noviembre 20 de 1974. Documento en poder de la Comisión Provincial por la Memoria.

Pseudónimo de Enrique Arancibia Clavel, agente de la DINA (Inteligencia chilena) infiltrado en Bs. As. MEMO 9-A HOJA Nº 2 enviado a Santiago de Chile el 3 de diciembre de 1974 (Incorporado a fs. 103, del expediente por la reapertura del caso Dicovsky; incidente N° 26 formado en la causa 1075/2006).

Testimonio del testigo Horacio Casal, quien dice que los dos vecinos que se sumaron de motu propio, ya han fallecido. Entrevista para este trabajo el 18 de junio de 2013.

Relato del periodista Carlos Tati Iglesias. También llegué a hablar con Yodko, ambos han fallecido. El Sol del miércoles 20, tituló en portada: “Violento enfrentamiento en San Francisco Solano: extremistas”.

Francisco Rubinetti: Quirno Costa 289 (1834) Temperley 4264-8800 http://www.paginasblancas.com.ar/Persona/s/Francisco-Rubinetti/Buenos-Aires | https://www.dateas.com/es/persona/francisco-rubinetti-20077142968

Docentes María Virginia Ferreyra Ramírez, Ana Carolina Torres, Romina Gisela Zino: Historia de un sobreviviente, Instituto Superior de Formación Docente 128, San Nicolás, agosto de 2006 (20 pp).

A Ceferino (d. 1975) su hijo, Gustavo, lo rememoró en el documental “Mi padre es un desaparecido”. Lito (30 años) será secuestrado en San Miguel de Tucumán el 1º de octubre de 1975 (N° CoNaDeP 7207, Decl. 1664).

Méndez, Eugenio: Santucho, entre la inteligencia y las armas. Ediciones La Toma, Buenos Aires, pp 125.

Diarios

Un diario especuló con que el cadáver secuestrado sería el de Víctor Manuel Taboada “un extremista muerto en un enfrentamiento con la policía hace dos semanas”. Fuente: Hallan dos cadáveres en una ruta bonaerense, en La Opinión, 22 de noviembre de 1974, pp 12. | Lo dio por seguro La Razón del mismo día en pp 10. | En realidad, como ya se mostró aquí, Taboada fue llevado con vida y torturado.

“No está lejos el día en que la Patria…”, en La Opinión, columna del 22 de noviembre, pp 12.

Clarín, 20/11/1974 El frustrado ataque a la Guarnición de Azul; El cautiverio. / Clarín del 21 de noviembre de 1974, pp 28, Política. / Inhumarán en Chacarita los Restos del Teniente Coronel Ibarzábal, en Clarín del 21 de noviembre de 1974, pp 28, Politica.

La Prensa, martes 26 de noviembre, pp 5, 2ª columna: Informó la Policía Federal sobre procedimientos antisubversivos. / La Prensa, 27 de noviembre, pp 7: Actuaciones sumariales por el ataque a la unidad de Azul. / La identidad de muchos terroristas detenidos y prófugos diose a conocer, en La Prensa, sábado 30 de noviembre de 1974, pp 3: (subtítulo) En Bs. As.

Mapa mal confeccionado. Fue corregido para esta investigación

La Razón, 26 de noviembre, pp 8 Se habría descubierto el cuartel General de una organización Extremista en Bs. As. y detenido a algunos importantes cabecillas. / Informó la Policía Federal acerca de procedimientos anti extremistas, en La Razón, 27 de noviembre, pp 11. / Lucha Antiguerrillera, en La Razón, 29 de noviembre, pp 8.

Estrella Roja N° 45, del 2 de diciembre de 1974, pp 2, en http://www.ruinasdigitales.com/revistas/EstrellaRoja%2045.pdf


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