
CORDOBA (de un enviado especial) –
En la primera etapa, Quilmes fue de menor a mayor. Empezó a sentir un mini asedio de Instituto aunque eso no se tradujo en situaciones de riesgo. Pero, poco a poco, el fondo Cervecero se asentó y permitió que se suelten Ortega y Erquiaga.

A los 14 minutos, David Drocco se lesionó y todos temblaron. En su lugar entró el uruguayo Richard Núñez para completar el medio. A partir de allí, si bien no dominó, el equipo de Benítez fue el que dio la se sensación de estar mejor. Las dos situaciones más claras se fueron sobre el final de esta primera parte.
Primero, una jugada con más de diez toques derivó en un centro de Ortega y cabezazo defectuoso de González, que se fue desviado.

Luego, cuando Núñez dio un pase atrás y Molina se fue solo al gol, pero Evangelista atoró bien y remató forzado ante Perafán, quien ganó el duelo.
En la siguiente hubo un claro penal de uno que agarró a Colman, pero Zunino dijo ¡no!

Para el segundo tiempo, el partido se cayó aun más. Tanto el local como el equipo de Benítez tuvieron serios problemas en penetrar en el área con reales posibilidades de peligro. Más bien el juego se desarrolló entre las medialunas.
Sin embargo, en esta tesitura fue Quilmes el que agarró la pelota e intentó ir al frente. Con el paso de los minutos, dominó al rival, trianguló pases y, más allá de las limitaciones, se mostró como un cuadro más predispuesto al ataque.
Lo de Instituto fue muy pobre. Mucho más cuando se fue expulsado Arzura por doble amarilla. (La más clara del partido fue para Quilmes).

En otro centro intrascendente, la defensa local no despejó de forma correcta y la pelota le quedó al ingresado Acosta. Este le pegó con alma y vida y el balón se fue al lado del palo.

El punto sirve porque se jugó de visitante y ante 20 mil socios de Instituto. En torneos así, no es poco demostrar carácter en un terreno adversario y donde se siente la condición de visitante.

Claro que se extrañó el poder de definición que hubo ante Mitre y que también se ausentó frente a Sacachispas. Quilmes tiene cosas que mejorar pero, por el momento, tiene el visto bueno del contexto.
