
Gabriel Leiva es bombero voluntario de San Francisco Solano, este sábado atendió a un chiquito que entró a guardia ahogado y con las maniobras precisas, que aprenden los bomberos en sus entrenamientos, le salvó la vida.
Hace una semana se dio otra situación parecida, con una niña que entró atragantada y sin signos vitales, se le hizo RCP y se recuperó.

Bravo Gabriel !!!
Vi el video por la TV. Tu determinacion y rapidez en tu reaccion salvaron a ese bebé.
Dios te bendiga y GRACIAS!!!
Gustavo desde Remedios de Escalada
El día que los políticos y funcionarios de este país sean voluntarios y con el altruismo de los bomberos, volveré a creer en Argentina. Bien por los bomberos!