Por Ulises Aguirre
(CIQ) – El duelo entre Argentino de Quilmes y Villa San Carlos terminó 1 a 1. Fue un flojo partido en general y con muchos errores en la defensa de ambas escuadras. Alejandro Lugones adelantó a la Villa a los 42 minutos de la segunda parte y Joaquín Molina en la última del partido con una muy buena jugada dejó atrás a tres rivales y la clavó en el ángulo. Elías Torancio se retiró con molestias nuevamente.
Con este once saltó al campo de juego el local: Tello, Fillol, D. Núñez, Giordano, T. Núñez, Filosa, L. Guzmán, Centurión, Ortiz, Torancio y Rebecchi. En los primeros minutos, comenzó con buen ritmo el Mate. Acechó el arco de Akimenco. La visita, por su parte, aprovechó los contragolpes que le dejaron la primer jugada de peligro cuando en una escapada Francisco Cairo remató al arco y Alejo Tello controló. Unos de los grandes protagonistas de esta tarde fueron los errores y despistes defensivos. Los de Cristian Grabinski, con la idea de salir desde el fondo, se complicaron en varias ocasiones con pelotas que quedaron cortas o terminaron en posesión rival. Uno de estos errores lo tuvo Fillol que en una recuperación quiso jugar con su arquero y le regaló la pelota a Zagert. El berissense finalmente remató incómodo al lado del palo.

Del otro lado también sucedieron estos errores. El arquero Akimenco ,con la intención de sacar del arco, le quedó corta. Torancio habilitó a Rebecchi mano a mano para que el golero en un acto de redención le tape el tanto al delantero y se quede con la bola.
El encuentro fue de ida y vuelta total, con la posibilidad de los dos equipos para ponerse en ventaja en todo momento. La primera parte la terminó mejor la visita porque Tello tuvo un atajadón de los de todos los encuentros a quemarropa en el área chica. Luego, se quedó con un tiro cuando se había quedado mal parada la defensa.
Al comienzo del complemento, Elías Torancio fue reemplazado nuevamente con molestias musculares. Dejó la cancha por Maidana. Está mitad fue más de lo mismo: idas y vueltas constantes. Lugones probó desde lejos a Alejo Tello con un anticipo de lo que sería el gol visitante y después Rebecchi que quedó otra vez mano a mano con Akimenco y volvió a ganar el arquero.
Los ataques criollos pasaban todos por lo pies de Maidana, que con unos toques creó lo más peligroso. Uno de esos pases dejó al ingresado Stable con una buena posibilidad que no terminó por aprovechar. Llegados ya lo últimos minutos del partido, la visita se encontró con un tiro libre a ¾ de cancha que Lugones, con mucha confianza, optó por pegarle al arco y no falló. Fue un derechazo infernal del jugador Villero que poco pudo hacer el arquero mate. Así, a los 42 minutos, puso el 1 a 0 parcial.

Con el encuentro en sus últimas jugadas y Argentino de Quilmes que ya enlazaba su segunda derrota al hilo, el local se tiró al ataque en busca del empate. Luego de una serie de centros que acecharon al arco rival, Joaquin Molina recibió en el lateral y, cuando todos esperaban la bola flotada a alguna cabeza, el chico se fue acercó a la frontal. Dejó a tres rivales atrás y sacó un remate al ángulo imposible para el arquero visitante, que nada pudo hacer. Fue el empate agónico que dos semanas atrás también se vio en La Barranca, pero esta vez a favor de los de Quilmes.
Argentino de Quilmes logró un empate importante para perder demasiados puestos y sumar ante un fuerte rival. El sábado que viene deberá visitar a Dock Sud, que tampoco viene de buena manera, y tratar de volver al triunfo que le es muy necesario.
