NUNCA MAS CENSURA

Por Andrés Garavelli, artista visual y docente egresado de la EMBA Carlos Morel

“Quiero denunciar y dar a conocer los hechos de intolerancia sucedidos sobre mi obra en la muestra Soberanía convocada por la galerista Pelusa Borthwick en memoria de Graciela Marotta y con motivo de resaltar los valores democráticos a 40 años del fin de la dictadura genocida civico, militar y eclesiástica.

“El 11 de marzo, en el centro cultural MACA de Villa Elisa, mientras se celebraba la inauguración de dicha exposición, una persona enfurecida comenzó a gritar y agredir verbalmente parado frente a mi instalación Cuadros Bajos, pidiendo que se retire la obra de la sala, ante la negativa de los organizadores, el agresor vuelve con un grupo de personas y retiran mi obra hacia el jardín donde la destruyen a golpes mientras amenazan de muerte a lxs organizadores, quienes decidieron clausurar la exposición.

A cuarenta años de democracia, estos hechos no pueden aceptarse y lejos de amedrentarnos deben potenciarnos para seguir trabajando, como artistas y docentes para que todxs podamos expresarnos en libertad y sin censuras. Ojalá estas líneas sirvan para reflexionar sobre el tiempo en que vivimos. Ojalá la intolerancia no nos gobierne… Nunca más”.

Andrés Garavelli
Andrés Garavelli, Claudio Mangifesta, profesores.

5 Respuestas a “NUNCA MAS CENSURA”

  1. La memoria es la forma que tenemos de habitar el pasado, desde el presente, siempre, con la mirada puesta en el futuro. Lo sucedido el 11 de marzo en nuestro espacio, reflota las tensiones de las intervenciones artísticas, sobre todo, cuando disputan el sentido sobre el propio pasado traumático, cuando pretenden enmarcarse en los procesos de memoria colectiva.
    Como sabemos, en nuestro país, pero también particularmente en nuestra localidad de Villa Elisa la violencia ejercida por la dictadura del 76´ todavía está latente. Fábricas clausuradas, casas marcadas, compañeros y compañeras que evocamos cada vez que podemos, como eco de resistencia a la represión clandestina.
    Las heridas de nuestra historia continúan abiertas. Por ellas emanan el dolor, la tristeza, la lucha, los afectos…El rostro de los asesinos, desata sensaciones incontenibles, la angustia sobrevive debajo de la piel. Aún cuando sea la denuncia, la que exponga estos mismos rostros.

    Desde el Centro Cultural Macá seguiremos acompañando la construcción de memoria colectiva, codo a codo con las viejas y las nuevas generaciones. La lucha es una sola, ahora y siempre.

  2. No es censura son las heridas abiertas que dejó la dictadura. Nunca Más imágenes de represores, expuestas sin explicación, que pueden seguir provocando dolor.

  3. Decir esto es no entender el sentido de la obra. Hay mucho analfabetismo visual. Y eso es peligroso..porque si no logramos leer o decodificar las imágenes, entonces nos venderán lo que quieran y nos dominarán..

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