MURIO LUIS STAFFORA

Conocido en muchos ámbitos por su personalidad amable y carismática, formó una familia y, en la adultez, decidió consagrarse a la religión como diácono, donde también con gran vocación cosechó amigos en su afán de servir.

Así lo informaron desde la Diócesis de Quilmes:

«Hoy partió a la Casa del Padre nuestro querido Diácono y amigo Luis María Stáffora.
Es otro duro golpe para nuestra Comunidad.
Les pedimos que acompañen con sus oraciones a su familia, su esposa Claudia y sus hijos, sus amigos y a esta Comunidad.»

Tanto sus ex compañeros del Colegio Normal, la ENET 24, como de los clubes deportivos por donde se destacó como jugador de hóckey, están despidiéndolo en las redes. Compartimos algunas:

«Q.E.P.D luis maria Staffora. Hoy nos dejó una de las personas mas buenas que conocí en la vida. Mi segundo papá, el papá de mis amigos y hermano de la vida, me duele mucho tu partida pero estoy orgulloso de haber compartido tan lindos momentos juntos. Recuerdos, historias, anécdotas y enseñanzas que nunca voy a olvidar. Te voy a extrañar mucho Luisito«.

Juan Manuel Galván

Esto lo escribió antes de ir a internarse en diciembre 2022.
Lo encontramos en su escritorio, donde preparaba sus homilías y rezaba.

«Nada es igual a sentirse amado.
Yo me siento amado por mi esposa, mis hijos, y por muchísimos de los que me rodean, pero también, por Diosito.
Me dio una buena vida, con hermosas y perfumadas rosas, a las cuales nunca les saco las espinas… sin espinas no serían rosas.
Amé, amo y seguiré amando todo cuanto me rodea, no sé vivir de otra manera, cuando llegue el momento de mi pascua, Tendré para mostrar al Señor los nombres de todos con los que compartí mi vida y mi entrega.
Fui y soy feliz por ser uno de tantos elegidos para el diaconado, me dio la posibilidad de sentirme útil a muchísimas personas y también recibir de ellas pruebas de amor, y para eso estamos.
Los amo desde lo más profundo de mi ser y sean felices. Yo lo soy».

Nota: sobre el pie de la hoja había un texto del Papa Francisco:

«Nunca he visto un camión de mudanza detrás de un cortejo fúnebre. Sin embargo, existe un tesoro que podemos llevar con nosotros mismos, un tesoro que nadie puede robar, que no es lo que hemos ahorrado sino lo que hemos dado a los demás».

A esto Luis agregó: «Recién al terminar leí esto del papa Francisco, ¿casualidad?»

No puedo pensar, estoy en un estado de confusión y angustia muy grande. Hoy a las 13, falleció mi hermano Luis María, dos años menor que yo. Desde muy chicos, tuvimos diferencias y discusiones de todo tipo, celos por tonterías, pero cuando a alguno de los tres alguien de afuera le hacía algún daño siempre estábamos los tres juntos con Francisco, defendiéndonos, cuidándonos el uno al otro, siempre fue un gran trabajador, pasó por muchos oficios y es lamentable que en ninguno o casi, le fue demasiado bien, no dejó nunca de luchar y proteger y poner a su familia en primer lugar. En los últimos años de su vida encontró su verdadera vocación, realizó el Seminario y se consagró como diácono (no sé si se dice así). Creo que eso, junto a su querida compañera de toda la vida, Claudia, sus tres hijos y sus nietos, lo hizo muy feliz, le dio sentido a su vida, y le permitió sentirse útil y al servicio de la gente, si estoy muy triste porque no lo pude despedir y aclarar nuestras diferencias. Querido hermano, descansa en paz.

Oscar Staffora

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